Cuando se enfrenta ese momento en que el trabajo médico es insuficiente o tardío, cuando pese a todo la enfermedad nos gana y llega la inminente muerte, toca afrontar la situación por demás compleja y dolorosa de decirle a los familiares que el paciente falleció.

Ayer cuando inicié mi turno a las 6.45 am, habían 3 mujeres en trabajo de parto, una de ellas tenía muerto el bebé y no lo sabía (el médico del turno anterior no se lo dijo..por que? no sé, que le había causado la muerte? no se sabía) , así que el turno empezó diciendole a una mamá que debía pasar por todo el trabajo de parto y al final iba a sacar a su bebé muerto, luego había que informarle al ansioso papá que esperaba afuera...las lagrimas y la tristeza las dejo a su imaginación.



pasan las horas, a la mamá le aumentan los dolores y es tiempo de tener a el bebé...



un colega atiende el parto...para que entiendan, los bebe estan flotando (por así decirlo) entre líquido amniótico que al verlo es como agua, pero cuando sacaron al bebé salió una especie de barro, espeso y fétido...eso era meconio, osea "el popo"; el bebé había hecho mucho "popo" durante mucho días y eso lo mató. (la explicación es mucho mas larga obviamente)...pero, en fin.



le mostramos el bebé a la madre (por obligación legal) y luego salí a informarle al papá que ya había tenido al bebé y a mostrarselo...

ese hombre miraba con tanto amor a ese que iba a ser su hijo, mientras yo le explicaba lo que había pasado.



Nunca le había dado esa noticia a nadie...maldita situación tan difícil...porque no importa cuantas explicaciones le des, no importa cuantas palabras bonitas uses, al final el paciente /su familiar se murió...

Después de eso, el día fue otro, para mi fue "normal" pero pensé mucho en ellos, me pensé en su situación, hablé con la madre y la vi llorar, y por mas ánimos que intenté darle todas mis palabras sonaban vacias y si yo las sentía vacias no me imagino lo poco que le debían estar sirviendo a ella.



definitivamente para morirse solo se necesita estar vivo